viernes, 18 de diciembre de 2009

El baile de la Victoria


En mi vagar incesante y solitario por las calles de Madrid, me he encontrado una película sobre Chile, de la cual jamás había oído hablar: su nombre es "El baile de Victoria" y es la ultima película del famoso director español Fernando Trueba, y también ha sido el film elegido por España para presentar a los Oscar como mejor película extranjera. Sin embargo la crítica española es más bien negativa con esta película basada en la obra homónima del conocido escritor Antonio Skarmeta.

La película transcurre en Chile, durante la transición democrática, justamente en el periodo en que Pinochet es extraditado de Inglaterra, y narra el cruce entre de tres personajes ordinarios, comunes, marginados de la sociedad: Vergara Grey, famoso ladrón experto en cajas fuertes, Ángel Santiago, joven ladronzuelo y Victoria, joven bailarina muda aplastada por la vida. La película narra con poesía y notas de realismo mágico una oda a los que se quedaron atrás y con esa pieza reivindica su espacio en la vida.
Trueba juega con elementos muy chilenos que van desde los burdeles y los completos hasta la cordillera, los cóndores y los caballos. La fotografía de Chile y como relata los diferentes imaginarios chilenos es muy preciso, sin embargo muchas veces los guiones son un poco escuetos y hay escenas familiares de Vergara Grey que dejaría de lado.

Trueba homenajea nuestro país con esta película, pero al mismo modo muestra sus heridas. Con el personaje de Victoria Ponce señala el trauma de este país, la herida abierta, el país mudo que ha estado atormentado, que ha sido torturado y que ya no puede hablar. Trueba no tiene tapujos en develar al hombre pudiente de derecha que se lleva a la mujer de Vergara Grey, personaje que llevaba más de diez anos de prisión.
Finalmente esta película hace añorar un Chile perdido, rural, un Chile en el que el galán no transporta su novia en un auto de lujo, si no que la lleva a caballo, un Chile pasado a naftalina y polvo que se quedo guardado en un cajón.


Tráiler de la película

domingo, 6 de diciembre de 2009

Elecciones en Chile

En París, todos los especialistas tratan de dilucidar lo que va a suceder la próxima semana, durante las elecciones Presidenciales en Chile. Algunos se maravillan con el fenómeno de MEO (Marco Enríquez-Ominami), mientras que otros anuncian el fin de la era concertacionista. Por mi parte, incapacitada a votar por mi candidato, sólo por encontrarme a miles de kilómetros de distancia, los observo.

De partida, es necesario hablar del fenómeno MEO, personaje que reencarna muchas posturas políticas y finalmente no representa mucho más que el concepto "díscolo": nacido en el exilio, hijo de un ícono revolucionario del MIR, el cineasta divorciado de las ideas socialistas y casado con la social democracia y el rating televisivo, propone ofertones baratos para los jóvenes apolíticos de la sociedad chilena y a uno que otro actorcillo de telenovelas. Meo es un fenómeno televisivo, un fenómeno mediático, que ha sido creado por los medios de comunicación - que en nuestro país son propiedad de la derecha - que vio en él la posibilidad de dividir a la Concertación y quebrar el eje "izquierda-derecha". El "díscolo" de Meo no sería lo que es hoy, si los altos mandos de la Concertación lo hubieran incluído en las votaciones internas para decidir el candidato del grupo. Sin embargo, Meo es el personaje que le vino a poner un poco de entretención al debate presidencial y a poner en jaque el status quo de la transición democrática chilena.

Puesto que entre Eduardo Frei - el ex Presidente de la República que ha sido uno de los presidentes peor evaluados de la Concertación y uno de los con menor carisma y labia política - y Piñera, que nos propone una reinvención del neoliberalismo y mucha mano dura, los chilenos no tenemos mucha elección.

Afortunadamente existe un candidato que si tiene cordura, inteligencia e ideas para generar un verdadero proyecto de país, ese candidato se llama Arrate y desgraciadamente no representa más que un 5% de los electores. Sin embargo, Arrate vino a decir aquello que no quería hablarse, los temas que molestan y que crean discordia, porque en Chile cuesta discutir ideas y hablar los temas de frente. Como decía el otro día en la Maison de l'Amérique Latine, el profesor Georges Couffignal, Chile es la sociedad más conservadora e hipócrita de América Latina.

Por mi parte creo que nuestra sociedad tiene muchos errores, pero al menos las malas experiencias nos han enseñado el significado de ciertas instituciones, por lo cual creo que los resultados no serán nefastos...

Veremos a quien eligen los chilenos este próximo domingo (aunque aún nos falta la segunda vuelta).



Un poco de la Franja Presidencial en Chile:

Opción 1: Jorge Arrate
Juntos Podemos Más



Opción 2: Marco Enríquez Ominami
Nueva Mayoría para Chile



Opción 3: Sebastián Piñera
Coalisión por el cambio



Opción 4: Eduardo Frei
Concertación de Partidos por la Democracia



Links de los candidatos:

www.arratepresidente.cl
www.marco2010.cl
www.efrei.cl
www.pinera2010.cl